Cuando se permite que animales peligrosos ataquen a individuos desprevenidos, sus dueños deben rendir cuentas. Las lesiones pueden ser dolorosas, desfigurantes e incluso potencialmente mortales. El daño nervioso grave o el daño a los músculos, ligamentos y tendones pueden hacer que la persona afectada viva con dolor y movimiento restringido en sus extremidades en los años venideros, y posiblemente durante toda la vida. En California, cuando ocurren tales incidentes, el dueño del animal es responsable de cualquier daño que el animal peligroso haya causado. Esto significa que cuando un animal ataca, el dueño de ese animal es automáticamente responsable de compensar a las víctimas por sus heridas. Sin embargo, en algunas circunstancias, la cadena de responsabilidad puede ir más allá. Por ejemplo, si la mordedura del perro ocurrió en una propiedad que el dueño del animal estaba alquilando, entonces el propietario también puede ser considerado responsable. Si el propietario a sabiendas permitió que un animal peligroso viviera en la propiedad, entonces él o ella también es responsable de las lesiones causadas. En Lallande Law, PLC, ponemos a su disposición nuestra experiencia en litigios en casos de mordeduras de animales para garantizar que se exploren todas las vías posibles de compensación.
Lallande Law, PLC ofrece consultas gratuitas a personas heridas por mordeduras de perros y otros ataques de animales. Para una consulta inicial gratuita con Lallande Law, PLC, complete el formulario de contacto o llame al (800) 308-8800.