acerca de
el caso
La demandante, que vestía una chaqueta con una gran capucha forrada de piel sobre su cabeza y auriculares "sobre la oreja" escuchando música "techno", se bajó de una acera, entró en un cruce de peatones y entró en el camino del autobús. El demandante chocó con el autobús cuando salía de la intersección. El demandante sufrió una lesión cerebral traumática leve, una fractura tibial derecha, fracturas faciales, una laceración en la frente y fracturas de 2 dientes. El demandante alegó que el conductor del autobús fue negligente por ingresar a la intersección en una luz amarilla y que pudo haber detenido el autobús y evitado el incidente. Los acusados impugnaron que la colisión fue culpa del demandante porque el demandante no buscó el tráfico que se aproximaba antes de que ella se bajara de la acera y entrara al cruce de peatones. Además, los demandados afirmaron que el demandante se había recuperado completamente de la lesión cerebral, citando el hecho de que después del incidente el demandante completó una maestría en una universidad de prestigio.